Desde el minuto  05:39 hasta el 07:39

Después de esa descripción voz en off de lo estupendos que son los videojuegos, de nuevo plano-contraplano de Punset  y Prensky  para profundizar en el asunto. Veamos si lo consiguen.

Punset. «¿Y cuáles son esos beneficios? Quiero decir, si reflexionamos un poco, ¿son mejores médicos, ahora? ¿Mejores soldados? ¿Son mejores profesionales? Me refiero a los que han practicado videojuegos.

[Lo que decíamos antes de que preguntar es centrar para que el entrevistado remate a placer…]

 Prensky.– Son todas esas cosas y lo interesante es que los que ahora tienen unos treinta o cuarenta años y que crecieron jugando con videojuegos parece que son mejores médicos, sobre todo aquellos médicos que operan por cirugía laparoscópica. Hay estudios de investigación que lo demuestran científicamente. Son mejores músicos. Mejores constructores de montañas rusas… porque son literalmente constructores de montañas rusas…, mejores hombres de negocios, mejores empresarios… Y la razón es que los videojuegos te enseñan a asumir riesgos, aprendes a actuar a partir de un feed-back, aprendes a tomar buenas decisiones… este tipo de cosas que luego transmitimos a todas nuestras profesiones»

 [En fin, me da pereza, pero… Así que los Jóvenes Sobradamente Preparados tienen los dedos más afinados para la cirugía o la construcción de montañas rusas a base de ejercitar los pulgares y los reflejos mientras matan marcianitos. Es un gran consuelo. El padre de Juanito puede estar tranquilo cuando le vea absorto en el pin- pan- pun de la pantalla. Por lo visto las relaciones humanas, la escuela, los juegos tradicionales, la dinámica del aula, el hábito de estudio, el deporte…, todo eso no sirve para aprender a asumir riesgos, actuar a partir de un feed-back o tomar buenas decisiones. Menos mal que han llegado los videojuegos para llenar ese vacío].

Punset.–«Los que juegan con ordenadores y videojuegos parecen como muy taciturnos, parecen reservados. Me pregunto si de alguna forma podemos aprender a conocerlos mejor. Dicho de otro modo: si podemos utilizar los ordenadores y los videojuegos para relacionarnos mejor con ellos.

 Prensky–. Es algo que durante mucho tiempo no hemos hecho. Creo que fue una oportunidad perdida. Siempre lo he pensado. Conseguir que los padres y sus hijos jugaran al mismo juego, cada uno con distintas habilidades adaptadas a su edad. Empezamos un poco con la Wii. Los de Nintendo sacaron la Wii y diseñaron deliberadamente un juego al que pudieran jugar juntos abuelos, padres e hijos y pienso que tienes toda la razón: es lo que debería pasar»

[Me temo que la pregunta de Punset no iba por ahí. Creo que ‘taciturnos’ y ‘reservados’, son benévolos eufemismos para describir a los chavales completamente colgados del asunto, frikis del pin-pan-pun y la estrategia, sin más tema de conversación ni mundo que ese.  Y el ciberoptimista se sale por la tangente con la Wii, estupendo videojuego social y familiar ­–diseñado deliberadamente, o sea, queriendo– que se aparta por completo del videojuego al uso y que, precisamente por ese uso social, se convierte no en un videojuego, sino en un juego, sin más aunque haya una pantalla por el medio. ¿Conoce alguien algún adicto ‘taciturno’ a la Wii? ¿Conoce alguien algún padre jugando con su hijo al pin-pan-pun para mantener el contacto con el adolescente colgado?  Ya nos decían que teníamos que ver la tele con nuestros hijos, pero la realidad es tozuda  y  la reina de las pantallas, el electrodoméstico familiar por excelencia, hace años que ha encapsulado a los individuos en las burbujas individuales de sus respectivas habitaciones. No te digo nada los videojuegos.]

Referencias:

Global Education Forum

Fundación SEK

Institución Educativa SEK

Vídeo completo

Texto completo de la deconstrucción