Si  los efectos de la tecnología dependen del uso que se haga de ella ¿qué tiene esta tecnología para que su uso sea tan masivamente incorrecto?

¿No habrá algo más en ella que va más allá de la buena o mala voluntad? No somos mala gente inclinada masivamente al aislamiento. Nos gusta conectarnos con los demás y con lo que nos rodea. Entre otras cosas, para eso queremos esa diminuta y eficaz pantalla llena de utilidades.  Y sin embargo… 

Gracias, José, por el envío.