Escuela y televisión …: por ahí pasa el grueso de la formación colectiva … La escuela está del lado de la civilización; la televisión, del de la barbarie. (pág. 186)
[¡Qué densidad encierra tal afirmación!. Sin embargo, el término «televisión» es la segunda vez que aparece y en la página 186. La primera vez lo hace para minimizar su importancia como causa de la mutación (¿?) ]
Somos gente esquizofrénica, que por la mañana razona como Hegel y después de la comida se transforma en pez, y respira con branquias (pág. 187) [Si es que a ese aplicarse la mascarilla de gas de adormidera se le puede llamar respirar.]
[Los chavales son] ¿Una especie singular de anfibios mentales o acaso lo que viven por las mañanas lo viven conteniendo la respiración? …¿están vivos sólo por las mañanas y por las tardes se dejan exprimir por un sistema rutilante, del que son víctimas más que protagonistas? [Yo diría, sin duda alguna, que, lamentablemente son más pescado que pez]
…la barbarie es una especie de ideología por defecto, que se concede gratis a todo el mundo y que es consumida de una forma masiva por quienes no tienen acceso a otras fuentes de formación [Ahora sí que lo has dicho, aunque sea enunciándolo sólo como posibilidad. Sin duda alguna, y es la mayoría de la población…] (pág. 187)
… Un error estratégico, porque si uno deja que el bárbaro llegue hasta debajo de las murallas, éste luego las supera, o encuentra una brecha o compra un traidor (pág. 188)
[Pero el bárbaro ya está dentro: en las familias y, a través de ellas, en los claustros, en las clases, en toda la sociedad…]
¿Qué sentido … puede tener dilapidar recursos significativos para legar a tantos y tantos bárbaros un bagaje mental del que ello, desde hace tiempo, han decido prescindir? ¿No sería bastante sensato utilizar esos mismos recursos para acompañar la formación de esa extraña, de esa nueva civilización, obligándola tal vez a conectarse con la sabiduría y el saber que ella tiende a liquidar…? [Pero ¿cómo? ….¡Ah, ya veo:] … presentarles las cosas con un poco más de atractivo… [¡Ay, ay, ay! que ya estamos con la presentación atractiva, la escuela divertida, la educación a través del deseo. ¿Qué significa el atractivo? ¿Vaciar de contenido a las cosas para que resulten así menos densas, menos pesadas, más digeribles, más televisables… o ―como por otra parte se ha hecho siempre en la buena educación― envolverlas en el amor del educador para que así sean amables para el educando?¿Y a cuál de estas dos tendencias se ha apuntado durante los últimos treinta años?] (pág. 189)
…
[Sin embargo,]…No se puede convertir a un nómada en… sedentario haciéndole casas en forma de tienda… Si se trata tan sólo de una cuestión de maquillaje …[La educación publicitaria de Ferrés (La Educación como industria del deseo, Gedisa, Barcelona, 2008)] entonces es una falsa solución y, …, es una rendición que únicamente servirá para prolongar la agonía… [En la que estamos] (pág. 190)
¡Qué claro está todo …….. cuando se quiere verlo! El problema es que los hombres contemporáneos, muchos, no se atreven ni a mirarlo, ….. ¡por si se asustan! Mientras, creen que no pasa nada, que si pasa algo nada se puede hacer, sobre todo creen que lo que pasa es «lo normal», éso, lo normal, como les dice la televisión. Lo que más oyen el la televisión es que no se les ocurra empezar a pensar por sí mismos porque eso ……. ¡está terminantemente prohibido!
Si quiere puede arriesgarse, pero ya sabe, le llamarán: anticuado, rancio, casposo, insolidario, de derechas, fascista, rico, culpable de todo, xenófobo, violento, crispador, desfasado, catastrofista, intolerante, insensible, retorcido, mentiroso, apocalíptico, falsario, ultra, misógino, viejo verde, cínico, hipócrita, violento, antipatriota, noserhumano, chorizo, franquista, ………… Sí, se lo aviso, todo eso le dirán en la prensa, radio y televisión de este país. Juro por lo más solemne que yo he oído decirle todas esas cosas y muchísimas más a la mitad de los españoles, en los medios del régimen democrático de izquierdas en que vivimos. Lo fantástico, lo colosal, es que eso fue hace años, hoy quien le va a decir todas esas cosas, está muy cerca de Vd. es su vecino, su compañero de trabajo, sus «amigos» y, por supuesto ¡¡¡ SUS HIJOS !!!
Ve Vd. lo que le pasa por no atreverse a mirar, por creer que si no piensa, es normal, no pasa nada. Pues ahora, y en tanto no se corrija, ¡fastídiese! Haber sido menos «moderno». Haber pensado.
José Luis