«Dos bárbaros de 8 años conversan en el parque. El niño le pregunta a la niña:
― ¿Que le vas a pedir como regalo al Santa Claus?
―Yo le voy a pedir una Barbie ¿y tú?
―Yo le voy a pedir un Tampax― responde el niño..
― ¿Qué es un Tampax?― pregunta la niña.
―No lo sé,… pero en la televisión dicen que con él puedes ir a la playa todos los días, andar en bicicleta, andar a caballo, bailar, ir a la disco, correr, hacer de todo y… lo mejor: ¡sin que nadie se dé cuenta!»
¿Es sólo un chiste?…
Vean televisión, no la consuman o serán consumidos por ella.
Cuidado con la ilustración del chiste. Mafalda representa la antibarbarie por excelencia ¡Es una niña contrasistema!
El chiste es chiste y «chiste». Muy oportuno el matiz, Pepe. Lo interesante es que el niño no utiliza otras palabras en su respuesta, que las que dicta el spot publicitario hecho, ¿para qué medio si no? para ser «consumido» en las pantallas de televisión. Y ya se ve que a los ojos de la inocencia (de la inteligencia aún sin filtrar) de los niños, el tampax es un regalo fenomenal. ¿Qué cosas mucho más prosaicas nos creemos los adultos del mundo simbólico en que nos zambullimos día tras día?
Apostaría, si me gustara hacerlo, que los «mayores» somos bastante más tontos que los niños en este tipo de credulidad.
Un abrazo, Pepe.
José Luis.