Miguel Zugaza (Director Museo del Prado)
La tecnología ha revolucionado la divulgación y el conocimiento de las obras de arte. [La palabra revolución se emplea con demasiada alegría…] Nunca como ahora hemos tenido un instrumento de comunicación visual tan potente. Blogs, wikipedia, revistas on line… Todos, tengan mayor o menor credibilidad, las utilizamos. Habría que preguntarse lo que hubiera opinado Diderot sobre la posibilidad de contar con redactores expertos [sic] en todas las materias a lo largo y ancho del mundo. [Seguramente hubiera iniciado otra Wikipedia con un propósito tan descabellado como el que motivó su iniciativa en el XVIII: reunir todo el saber… Como si el saber fuera apelotonable en un todo] Las nuevas tecnologías son una herramienta y su buen uso depende de los educadores y de los padres [¡cómo no, otra vez nosotros!]. En cualquier caso estamos inmersos en una revolución cuyas consecuencias no conocemos. [De eso se trata. De ir evaluándolas y conociéndolas para no dar palos de ciego y hacer las cosas bien].
Alejo Stivel (Músico)
Internet es una herramienta maravillosa, pero siempre que exista compensación justa para los artistas». [Cada uno arrima el ascua a su sardina]
Carlos Herrera (comunicador)
«La tecnlogía ha revolucinado la divulgación y el conocimiento de las obras de arte». La divulgación, sin duda; el conocimiento ya es algo mucho más cuestionable. El conocimiento real de una obra de arte parece exigir la observación del original, en su lugar de ubicación y dentro de un contexto. Ninguna de estas condiciones cumple el mero conocimiento de «la imagen» de la obra de arte, excepto en el caso de la música, cuya forma material hay que «recrear» cada vez que quiere ser «observada».
Sí, estoy de acuerdo, lo de «redactores expertos» puede ser visto hoy como una «ingenuidad» de Zugaza.
Stivel, dice también en «aquí» que en los colegios debería escucharse música buena, clásica y moderna, para la formación del gusto musical de los alumnos y me parece muy acertado. Ignoro si se hace y si la asignatura de Lenguaje Musical contempla la audición en el aula de programas bien elegidos. Para ello, Interenet y un sistema de sonido de calidad hi-fi serian los recursos materiales adecuados. No voy a extenderme aqui hablando de los beneficios que reportaría el estudio de una introducción a la música en el cerebro de los alumnos, porque hay abundante material pedagógico al respecto.
A Carlos Herrera no puedo pasarle una incorrección que no es menor: En Física no existen los «preceptos» (ni viejos, ni novísimos), existen los teoremas, las leyes, los axiomas, los fenómenos, incluso hasta las paradojas, pero los preceptos… ¡por favor!
Por otra parte, no queriendo caer en lo pedante, servidor ha estudiado algo de Física (especialmente, Óptica) y nunca he leído lo que expresa el «viejo precepto» de que «luz+luz = posible oscuridad». En todo caso: luz A + luz B = luz (A+B). El resto de sus opiniones no arrojan una especial reflexión.
Del conjunto de opiniones traídas por Pepe hoy y en días anteriores, se deduce, a mi modo de ver, que la proximidad y el uso cotidiano de las tecnologías, no permite fácilmente tomar una distancia crítica, una contemplación global de los elementos socio y psicológicos afectados por su utilización, En definitiva: que no es fácil pensar crítiamente los medios tecnológicos de los que nos servimos.
José Luis
No sé en Física, amigo, pero sí sé, como Herrera, que demasiada luz puede cegar y que demasiada información desinformar.
Para que la luz nos ciegue no hace falta que sea demasiada, amigo, basta con que incida «normalmente» en nuestra retina. El sol, que concreta la mayor suma posible de luz, no nos ciega si no lo miramos directamente. Llevado esto a la desinformación producida por el exceso de información, cabe preguntarse si es dicho exceso (mas teórico que real) o la elección de las fuentes lo que determina estar mejor o peor informado.
José Luis