Miguel Ángel Domínguez, director de “24 horas” de RNE, Premio Luis Carandell de Periodismo Parlamentario  Fran Sevilla, periodista de RNE, estuvo secuestrado en Irak

    Miguel Ángel Domínguez                                                                       Fran Sevilla

 

En el panorama sobreinformativo confuso e inasequible del medioambiente simbólico, lleno de imágenes y vacío de palabras, el usuario de los medios  no tiene nada fácil acceder a la información que le revele la realidad de los hechos,  porque para llegar a ella primero tiene que esquivar ese muro de informaciones aparentes que se conoce paradójicamente como sociedad de la información: seguidores y seguimientos,  navegaciones y enlaces,  espectacularización de la noticia, pseudodebates precocinados, entrevistas espectáculo,  pseudoacontecimientos, amateurismo periodístico, redes sociales, vídeos, whatsapps,  alertas, tweets,  flashes, impactos, titulares que son eslóganes y eslóganes que son titulares,  pensamiento rápido y pensamiento débil, surfing superficial… Un muro de ruido informativo, en definitiva, que en vez de acercarnos la realidad, la distorsiona y aleja de nosotros haciéndonosla incomprensible.

Si ‘noticia’ es aquello que nos cuentan y no sabíamos, aquello que nos explica la realidad de lo que ocurre, lo que nos desvela qué hay detrás de los hechos…, la escasez de noticias es una de las características paradójicas de esta sociedad sobreinformada. Los medios, la mayor parte de las veces, se convierten no en transmisores de noticias, sino en cómplices altavoces repetitivos de una crónica anunciada o, peor, en portavoces clónicos de la ceremonia de la confusión que generan los partidos políticos. La actualidad no es actual, sino siempre antigua, pasada por el turmix de los dimes, diretes y sobreentendidos del discurso público. De hecho no es noticia, sino discurso.

La información hoy no es lo que sucede, ni mucho menos por qué sucede. La información hoy es creación de información a partir de la información. Es pseudoacontecimiento: los medios no son medios para mediar entre la realidad y el usuario explicándosela, sino medios para multiplicar la creación de actualidad por parte de los agentes creadores de opinión: partidos, instituciones, corporaciones, gabinetes y  grupos de presión.

Unas decenas de individuos se ponen una camiseta verde, convocan a la prensa que tiene que informarnos y se manifiestan gritando unas consignas contra determinado gabinete ministerial en defensa de la enseñanza pública. Las cámaras los captan y los televisores los introducen en nuestro cuarto de estar y en nuestro imaginario colectivo. La alcachofa del aguerrido reportero se pone a disposición del vocero manifestante para que durante unos segundos nos suelte sus consignas… Se crea así la marea verde. ¿Pero cuál es la noticia? ¿Quiénes son estas personas? ¿A quién representan? ¿Cómo, dónde y cuándo se ha cocinado esa estrategia, ese símbolo y esos eslóganes? ¿Quién ha encargado las camisetas y cuánto han costado? ¿Quién y con qué fondos financia  ese encargo? ¿Qué hay de cierto en lo que vocean? ¿La enseñanza pública está siendo atacada ya que necesita ser defendida? ¿de qué modo? ¿La enseñanza pública se opone a la enseñanza concertada financiada también con fondos públicos? … Nada de esto nos es explicado ni respondido. La información es una pura creación de un grupo supuestamente espontáneo que utiliza a la prensa como simple amplificador. El intermediario no media porque no está entre  los hechos y los ciudadanos, sino en un lado, formando parte del circo que confecciona el mensaje. ¿Dónde queda la realidad? La noticia no es nada. La información es cero. Todo es pura estrategia planificada de antemano contando con la complicidad de la rutina mediática. Y así se va construyendo la opinión pública que es testigo de lo que pasa, pero no entiende nada de lo que ocurre y acaba opinando lo que ve, lo que oye, pero no lo que sabe porque no sabe nada.

En ese panorama mediático, sorprende una hora diaria de información realizada  por profesionales , es decir, periodistas, verdaderos intermediarios entre lo que ocurre y lo que sabemos de lo que ocurre:  un programa de radio que se llama CINCO CONTINENTES, dirigido por Fran Sevilla y presentado por Miguel Ángel Domínguez, todos los días de 9 a 10 de la noche dentro del paquete informativo que con el nombre de 24 horas llena la programación  de Radio Nacional de España,  de 8 a 12 de la noche. Sin publicidad, sin concesiones a la galería, siguiendo la agenda de la actualidad, pero yendo cada día más allá de ella, contando con verdaderos expertos que saben y explican con tiempo –¡en la radio!- lo que saben para hacérnoslo saber a los oyentes, cumple con el título del programa llevándonos diariamente a un paseo por el mundo que nos lo va haciendo un poco más comprensible. Es una agradable y útil sorpresa generadora de información.

Si existieran esos premios que estamos intentando poner en marcha llamados Inmensa Minoría, pensados para poner de relieve el buen trabajo mediático al servicio de los usuarios de los medios, aquí tenemos un producto candidato y unos profesionales nominables.

No es información pura, porque esta no existe, pero sí pura información.

Referencias

Cinco continentes

24 horas