Faro II: el sentido del humor del sentido común

7 Comentarios

1. 

   Pedro Baranda el marzo 27, 2011 a las 17:35

   Francamente buenos. El humor para demitificar y desmontar tanta confusión pedagógica y tanta furrifalla tecnológica. Absolutamente genial.

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2. 

   Pepe Boza el marzo 27, 2011 a las 18:42

   Nada como hacer unas risas… en serio.

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3. 

   JORGE RZ el marzo 27, 2011 a las 18:59

   son muy buenos, como molaria tener ordenadores en clase

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4. 

   Pepe Boza el marzo 27, 2011 a las 22:28

   Molaría, sí. Pero lo sustancial, George, seguiría siendo el trabajo, amigo. Eso no hay quien lo cambie.

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5. 

   jose luis el marzo 28, 2011 a las 10:28

   El de «tu padre» me ha encantado.

   Y para los que estéis en situación parecida a la del papá con la mochila cargada de cosas importantísimas (que le hacen de la vida una fatiga), mirad a ver lo que hacéis, no os vaya a pasar como a mí, que el mayor de mis cuatro hijos (que ya me ha hecho abuelo) se va a vivir a Chile (ná, aquí al lado) porque su mujer es chilena y tienen allá más posibilidades laborales que aquí en esta irreconocible y cutre España. Y ahora que nos damos cuenta DE VERDAD de que no hay nada más IMPORTANTÍSIMO que la familia, andamos haciendo planes de vernos todos lo más posible en este mes y pocos días que nos quedan para poder «tocarnos la piel» (tiempo juntos) tanto como sea posible aún.

   De verdad: cuántas cosas «inaplazables» hubiera dejado de hacer de haber sabido que éstas cosas pueden pasar (a uno), por estar más cerca todos y disfrutarnos más, muchísimo más de lo que lo hicimos cuando podíamos.

   Lo más importante para los hijos es «tener» a sus padres.

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6. 

   Elvira:) el marzo 28, 2011 a las 13:21

   Mira papá, en el último podríamos aparecer perfectamente tu y yo: «Papá, ¿Vamos a jugar a baloncesto?» «Papá, ¿Me llevas a esquiar?».

   A pesar del parecido, ¡Son buenísimos!

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7. 

   Pepe Boza el marzo 28, 2011 a las 16:39

   Tocarnos la piel… cuando la piel se aleja. Ánimo, José Luis. Te veo en Chile.
   Ya sabía yo, Elvira, que podía salir escaldado de la prueba. ¿Qué padre no? ¿Quizá Eric? Aunque eso no es un padre, es una «máquina».

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